Opúsculo escrito por el sacerdote y periodista José Luis Martín Descalzo en 1958 para la editorial PPC en el que se dan una serie de pautas destinadas a jóvenes y adultos católicos a la hora de elegir sus lecturas; en este caso, de novelas. Abandonados ciertos prejuicios contra este tipo de relatos, el autor se adentraba en las dieciséis páginas interiores de este folleto, tras el consabido preámbulo explicativo, en establecer un catálogo de novelas aptas para los potenciales destinarios de la publicación. Así, al lado de autores tan consagrados y reconocidos como Chesterton, Dickens o Kipling, Descalzo seleccionaba algunos títulos de lo que hemos dado en llamar novela popular, por aquellos años muy menospreciada por la intelectualidad. Entre ellos, por ejemplo, se relacionaban obras de Fidel Prado (El barranco de la muerte), José Mallorquí (El valle de los trece condenados) o Marisa Villardefrancos (El secreto de los ojos tristes)
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